Por el término de tres días, el gimnasio de Deportes de Combate del barrio Chacra IV fue escenario de una experiencia deportiva y humana sin precedentes: el intercambio binacional de Taekwondo-WT entre Argentina y Chile, que reunió a escuelas de Río Grande, Tolhuin y Punta Arenas. La iniciativa fue organizada por la Escuela Municipal de Taekwondo-WT, bajo la conducción del Maestro 5to. Dan Marcelo Villarroel, quien se mostró profundamente satisfecho por el nivel de compromiso, entusiasmo y disciplina demostrado por todos los participantes.

Río Grande.- “Este tipo de encuentros son esenciales para el crecimiento del Taekwondo WT fueguino. Nos permiten comparar metodologías, intercambiar ideas y, sobre todo, fortalecer los lazos de camaradería que existen entre los practicantes de ambos países”, destacó Villarroel.

Un evento que reunió a tres ciudades y dos naciones

El intercambio fue posible gracias a la coordinación entre el Maestro Villarroel, responsable de la Escuela Municipal de Taekwondo WT, y el Maestro Óscar Velásquez, 5to. Dan y director de la prestigiosa Escuela Rott TDK de Punta Arenas, una de las instituciones con mayor trayectoria en Chile.

Velásquez arribó a la ciudad con una delegación de diez competidores chilenos, quienes compartieron prácticas con alumnos y alumnas de las escuelas de Río Grande y Tolhuin, en una propuesta que combinó sesiones técnicas, charlas teóricas y prácticas de combate controlado.

Durante las tres jornadas, los deportistas participaron en trabajos conjuntos que incluyeron análisis de combate, perfeccionamiento de movimientos, estrategias tácticas y demostraciones de técnicas avanzadas. “Cada uno de los entrenamientos fue una oportunidad para aprender algo nuevo, para observar cómo trabaja el otro y para fortalecer el espíritu de cooperación”, explicó Villarroel.

Marcelo Villarroel, un referente con más de tres décadas dedicadas al Taekwondo WT

Nacido en Río Grande, Marcelo Villarroel comenzó su práctica en el Taekwondo WT a comienzos de la década del ’90. Con el paso de los años, su pasión por la disciplina lo llevó a formarse con los mejores maestros del país y alcanzar el grado de 5to. Dan, convirtiéndose en uno de los principales referentes del Taekwondo olímpico (WT) en la región patagónica.

Desde hace más de veinte años, Villarroel se desempeña como instructor y formador de deportistas, representando a la provincia en torneos nacionales e internacionales, y formando a decenas de practicantes que hoy son parte activa del circuito competitivo argentino.

Su visión siempre estuvo centrada en el desarrollo integral del alumno: “El Taekwondo no solo es un deporte, es una forma de vida. Enseña respeto, disciplina, perseverancia y autocontrol. Quien lo practica aprende a dominar su cuerpo, pero también sus emociones”, afirmó.

Además de su labor docente, el Maestro ha sido un gestor incansable de eventos deportivos, impulsando torneos locales, capacitaciones técnicas y exhibiciones que posicionaron a Tierra del Fuego como una de las provincias con mayor actividad marcial del sur argentino.

Aprendizaje y tecnología: una combinación que impulsa el crecimiento

Uno de los aspectos más destacados del intercambio fue la incorporación de la tecnología electrónica aplicada al entrenamiento, gracias al aporte de la delegación chilena, que trajo consigo un sistema completo de pecheras y cabezales electrónicos similares a los utilizados en competencias internacionales.

“Los chicos pudieron experimentar un entrenamiento con equipamiento de última generación. Las pecheras electrónicas marcan con precisión los impactos válidos, algo que les permite mejorar la técnica y adaptarse a las exigencias del alto rendimiento”, explicó Villarroel.

El entrenamiento con este sistema se llevó a cabo el domingo de 11:00 a 14:00 horas, en una jornada de intensa práctica supervisada por instructores de ambos países. Allí, los deportistas pudieron medir su desempeño, trabajar la precisión de los golpes y comprender la importancia del control y la táctica en combate.

“Estos ejercicios ayudan a que los alumnos entiendan cómo puntuar correctamente en una competencia real. Es un paso enorme hacia el profesionalismo y la excelencia técnica”, agregó el Maestro.

El valor del intercambio humano y la motivación del ejemplo

Entre los visitantes chilenos destacó la presencia de Felipe Velásquez, joven medallista panamericano e hijo del Maestro Óscar Velásquez, quien compartió entrenamientos y brindó consejos a los deportistas más jóvenes.

“El hecho de que un atleta de nivel internacional comparta su experiencia con los chicos fue increíble. Lo tomaron como un ejemplo a seguir, y eso les dio un impulso enorme”, comentó Villarroel.

A lo largo de las jornadas, el ambiente se caracterizó por el respeto mutuo, la camaradería y la motivación. Los padres y familias también acompañaron las actividades, generando un entorno comunitario que reafirma el rol social del deporte.

“El Taekwondo WT no distingue fronteras ni edades. Une a las personas en torno a valores comunes: respeto, disciplina, humildad. Ese es el verdadero espíritu de este arte marcial”, reflexionó Villarroel.

El gimnasio de Deportes de Combate: un espacio modelo para el desarrollo marcial

El evento tuvo lugar en el moderno gimnasio de Deportes de Combate del barrio Chacra IV, un espacio que se ha convertido en referencia provincial para las disciplinas marciales como el Taekwondo-WT, ITF, Karate, Kickboxing y Boxeo.

Villarroel destacó la importancia de contar con este tipo de infraestructura: “El profesor Velásquez quedó sorprendido por las instalaciones. Contar con un gimnasio totalmente equipado, con pisos reglamentarios, colchonetas y un espacio propio para las artes marciales, es un privilegio que debemos valorar”.

El Maestro aprovechó la oportunidad para agradecer al Municipio de Río Grande por el constante apoyo a las actividades deportivas y por facilitar los espacios para la práctica del Taekwondo WT: “Sin este acompañamiento sería muy difícil organizar eventos de esta magnitud. Es fundamental que el Estado esté presente para fomentar el desarrollo de nuestros deportistas”.

Camino a la séptima Copa Tierra del Fuego

El intercambio también sirvió como preparación para la séptima edición de la Copa Tierra del Fuego, el torneo más importante de la disciplina en la región, que se llevará a cabo los días 16, 17 y 18 de octubre de 2026 en el Polideportivo Carlos Margalot.

“Ya tenemos confirmada la presencia de escuelas de Río Gallegos, Ushuaia, Tolhuin, Punta Arenas y Río Grande. Será una competencia de altísimo nivel, con tecnología electrónica, video replay y más de ocho escuelas en competencia”, adelantó Villarroel.

El evento contará con el apoyo técnico de la Federación de Taekwondo-WT, y busca consolidarse como un punto de encuentro anual entre las escuelas del sur de Argentina y Chile.

“Esta Copa ya es un clásico. Cada edición crece en número de participantes y en nivel técnico. Es un orgullo para nosotros que se realice aquí, en nuestra ciudad”, sostuvo el Maestro.

El legado de un formador y el crecimiento del Taekwondo fueguino

A lo largo de su trayectoria, Marcelo Villarroel ha formado a cientos de jóvenes que hoy continúan su camino en el Taekwondo WT, ya sea como competidores, instructores o formadores. Muchos de ellos comenzaron en la Escuela Municipal y hoy representan a la provincia en torneos nacionales e internacionales.

“Ver a mis alumnos crecer y enseñar es lo más gratificante. El Taekwondo es una cadena de enseñanza que no se corta. Cada generación debe transmitir lo aprendido a la siguiente”, expresó.

En ese sentido, destacó la importancia de seguir promoviendo encuentros y capacitaciones que fomenten la unión entre escuelas y el aprendizaje constante. “El intercambio con Chile fue una muestra de que el deporte puede unir culturas, superar distancias y fortalecer vínculos. Ojalá podamos repetirlo cada año”.

Una experiencia que trasciende lo deportivo

El cierre de las jornadas dejó un balance más que positivo. Los alumnos no solo mejoraron sus habilidades técnicas, sino que también compartieron valores, amistades y aprendizajes que quedarán como parte de su formación personal.

“El deporte, cuando se practica con pasión y respeto, se convierte en una herramienta poderosa de transformación. Y el Taekwondo WT, con su filosofía de vida, enseña mucho más que a combatir: enseña a ser mejores personas”, concluyó Villarroel, visiblemente emocionado.

El Maestro agradeció una vez más a las autoridades locales, a los profesores de las distintas escuelas, a los padres y, sobre todo, a los alumnos, por su compromiso. “Son ellos el verdadero motor de todo esto. Nosotros sembramos el camino, pero son los chicos los que lo transitan con esfuerzo y alegría”.

Por su parte, el Sabonín Óscar Velásquez, director de la prestigiosa Academia Rott de Punta Arenas, destacó el alto nivel de organización y el profesionalismo con el que se desarrolló el evento. “Fuimos invitados por el maestro Marcelo Villarroel para realizar un entrenamiento en conjunto durante el fin de semana. Ya llevamos dos días y mañana finalizamos con un encuentro de combates. La idea es compartir experiencias y fortalecer la formación técnica de los deportistas de ambos países”, explicó.

Velásquez detalló que la delegación chilena estuvo integrada por atletas de distintas categorías, entre ellos deportistas con ranking panamericano, seleccionados nacionales y jóvenes que integran el top cuatro del ranking de Chile. “Nuestra intención es generar un vínculo sólido entre las escuelas, y por eso trajimos toda la implementación electrónica que utilizamos en competencias internacionales, para reproducir un escenario real de competencia”, añadió.

El valor de la tecnología aplicada al Taekwondo

Uno de los aspectos más destacados del encuentro fue la utilización de pecheras y cabezales electrónicos, elementos que permiten un registro más preciso y objetivo durante los combates. Velásquez explicó que “gracias a la implementación electrónica, los deportistas pueden experimentar una simulación casi idéntica a la de un campeonato oficial, lo que mejora notablemente la calidad del entrenamiento”.

El maestro chileno subrayó la importancia de estas herramientas en la formación de nuevos talentos. “Este tipo de equipamiento permite enfocar el trabajo en aspectos específicos del rendimiento competitivo. En nuestro caso, dos de los atletas que viajaron a Río Grande están actualmente entre los mejores del continente: uno fue número uno del ranking panamericano y otro está postulando para los Juegos Olímpicos de la Juventud 2026 que se realizarán en Senegal, ocupando el séptimo puesto del ranking panamericano”, precisó.

La proyección del Taekwondo en la Patagonia Sur-Sur

El intercambio dejó en evidencia el notable crecimiento del Taekwondo en la región patagónica. Escuelas de ambas márgenes de la frontera han logrado consolidar programas de formación técnica y competitiva que hoy posicionan a la Patagonia como una de las zonas de mayor proyección en el ámbito del Taekwondo olímpico.

“Río Grande tiene un nivel de atletas muy alto, y lo vemos cada vez que compartimos eventos. Nosotros tenemos la posibilidad de salir a competir internacionalmente y siempre nos encontramos con representantes de esta ciudad, con un nivel muy bueno. Para nosotros es un privilegio venir acá, compartir las instalaciones y entrenar con deportistas tan comprometidos”, destacó Velásquez.

El Sabonín chileno también valoró el trabajo conjunto con el Maestro Villarroel, señalando que ambos comparten una misma visión del Taekwondo como herramienta educativa, social y de integración. “Estas jornadas no son solo técnicas: son encuentros de amistad, de respeto mutuo y de crecimiento para todos. Los alumnos observan, aprenden y se motivan al ver cómo se entrena en otro país”, dijo.

La importancia del trabajo invisible

Más allá de las medallas y los logros visibles, Velásquez recordó que el verdadero valor del Taekwondo radica en el proceso formativo que viven los deportistas y sus familias. “El trabajo que hay detrás es enorme y muchas veces invisible. Solo se ven los resultados cuando llegan las medallas, pero hay un esfuerzo constante de los atletas, de los padres y de los instructores. Llegar a un nivel internacional es fruto de años de dedicación”, expresó.

El maestro hizo especial mención al caso de Felipe Velásquez, medallista panamericano e hijo del Sabonín, y de Fernanda Gómez, joven atleta que obtuvo en febrero de este año una medalla en el USA Open de Estados Unidos, destacando que “llegar a una competencia de ese nivel, donde cada categoría tiene más de 60 competidores, es un mérito enorme”.

Infraestructura y apoyo institucional

Durante su estancia en Río Grande, el maestro chileno manifestó su admiración por las instalaciones del gimnasio de Deportes de Combate. “Las condiciones que tienen aquí son espectaculares. Ojalá pudiéramos contar con algo similar en Punta Arenas. Este tipo de infraestructura fortalece mucho el deporte y demuestra una clara visión por parte de las autoridades locales”, señaló.

Velásquez resaltó que el crecimiento deportivo de la ciudad fueguina es resultado de un trabajo conjunto entre las escuelas, los instructores y el acompañamiento de las instituciones públicas. “Desde que era competidor y venía a Río Grande, he visto un crecimiento enorme. El nivel técnico y organizativo que tienen hoy es admirable, y eso se logra cuando los gobiernos y las dirigencias políticas comprenden la importancia del deporte como herramienta de desarrollo”, afirmó.

Una proyección que mira al 2026

El Sabonín también adelantó detalles de lo que será la próxima gran cita del Taekwondo en la región: la séptima edición de la Copa Tierra del Fuego, que se realizará en octubre de 2026. “Con el Maestro Villarroel estamos trabajando para ese evento, que será de primer nivel. Nosotros ya nos comprometimos a traer todo el sistema electrónico y el video replay, que es el sistema que utilizan los árbitros internacionales. Queremos que sea un torneo con estándares de competencia mundial”, confirmó.

El evento promete reunir a escuelas de toda la Patagonia Sur-Sur, incluyendo delegaciones de Chile, Río Gallegos, Ushuaia, Tolhuin y Río Grande, consolidando así un espacio de encuentro donde el respeto, la disciplina y la excelencia técnica serán protagonistas.

Hermandad deportiva y futuro compartido

El intercambio binacional dejó no solo una valiosa experiencia para los deportistas, sino también un fuerte mensaje de integración y cooperación entre las comunidades deportivas de ambos países. “El Taekwondo une, forma y transforma. Hoy más que nunca necesitamos este tipo de experiencias, que fortalecen los vínculos y hacen crecer a nuestros alumnos en lo humano y en lo deportivo”, reflexionó Velásquez antes de su regreso a Punta Arenas.

El maestro chileno concluyó agradeciendo la hospitalidad de la comunidad fueguina y reafirmando su compromiso de continuar trabajando junto al Maestro Villarroel en futuras actividades conjuntas. “Me siento profundamente agradecido de poder estar aquí, compartir lo que amamos y seguir aprendiendo. Este deporte nos enseña que siempre hay algo más por mejorar y que la verdadera victoria está en el esfuerzo diario”, cerró.

Un encuentro que dejó huella

La visita de la Escuela Rott TDK de Punta Arenas y el intercambio con las escuelas fueguinas no solo consolidaron lazos deportivos, sino que también proyectaron un mensaje de cooperación y excelencia que trasciende fronteras.

El gimnasio de Deporte de Combate de Chacra IV se transformó durante tres días en un escenario de aprendizaje, respeto y superación, donde cada combate, cada saludo y cada gesto reafirmó el espíritu del Taekwondo: disciplina, perseverancia y fraternidad.

Con la mirada puesta en el futuro y en el crecimiento conjunto, tanto los maestros como los alumnos de ambos países demostraron que el deporte, más allá de la competencia, es una herramienta poderosa para unir pueblos y cultivar valores que perduran.